Sho-Hai colgó el cártel de Sold Out en la Sala Apolo para contemplar el estreno de La Última Función en Barcelona.
Hígados, cuellos y palmas sufieron por igual el paso del Maestro Sho-Hai por tierras catalanas. La Última Función trajo consigo el Funk, sedució a la gamberra del Punk y deleitó con el rap de siempre a los 1.200 fieles que acudieron a la Sala Apolo. La voz desgarrada de Sergio Bolínguez se apoyaba en los coros de Ossian para soltar los tramos de su último LP, combinando con temas de Doble Vida y míticos de Violadores del Verso.
Hubo sorpresas, la ocasión así lo reclamaba. A escena subían maños y hermanos del protagonista por igual. De esta manera, Xhelazz entraba al tapiz para despertar los aplausos y recibir energía de cara a la elaboración de su próximo trabajo. Más cruda fue la entrada de Kase.O, que elevó los puños al cielo para describirnos Pequeños Lujos.
Concierto para enmarcar en la gira de La Última Función, que después de haber dejado algún que otro cuello en forma, prolonga su presencia en tierras catalanas de cara al mes de Octubre, con conciertos en Hospitalet y Manresa. Siempre Beodos, siempre Bolínguez.